A través del grupo de fotografía al que pertenecemos me pasó un link para que echara un vistazo a los trabajos de este singular personaje.
Quedé impresionado. Impresionado por todas las series que se pueden ver en su web personal:
Flesh Rainbow, Abandon y Woodpecker.
En ellas aparecen a menudo desnudos difíciles de olvidar: hombres peludos, mujeres y hombres pasados de peso, penes pequeños y/o torcidos, panzas, estrías, cartucheras, costillas, pubis femeninos sin depilar, granos... vamos, el pack completo de aquello que la sociedad cataloga como antiestético pero que todos tenemos en mayor o menor medida. Yo tengo vello en hombros, espalda y glúteos, mi panza oscila de tamaño según la época del año pero siempre se aleja de la utópica tableta de chocolate, mis atributos masculinos no destacan por su tamaño y de vez en cuando me salen algunos granos francamente feos. También mi cara empieza a denotar rasgos de cansancio y achaque, ojeras y mirada de triste cansancio físico y anímico... y soy feliz y no me considero feo, desgraciado, ni triste.
Es más, de hecho si por algún motivo me ha impactado el señor Bark es por algo que me pasó la mañana del 24 de diciembre.
Había dormido desnudo, completamente. Me levanté por la mañana y fui al lavabo. Tal como entré y encendí la luz me detuve a hacer algo que deberíamos hacer más a menudo: contemplé despacio mi cuerpo. Claro que por la mañana es más de agradecer, pues tengo el estómago menos inflado, el vientre algo más liso (dentro de mis posibilidades) y el pene (el mío en este caso y el de los hombres en general) o está erecto o en estado de semi-erección, lo que todo el mundo denomina vulgarmente como "morcillona" lo cuál te hace sentir más hombre, más viril, más atractivo y más dispuesto para mostrarte sin pudor alguno, vamos, que me paseé tranquilamente en pelotas por casa y más feliz que una perdiz.
Y he decidido proponerme hacer una serie de fotografías de desnudos. Porqué así es como me siento espiritualmente, sin tapujos, libre de ataduras con lo que considero vanal y prescindible. Y las fotos serán mías porque me siento orgulloso de lo que soy y de cómo soy. Me gusta la estética de mi cuerpo a pesar de que a veces diste de los cánones de belleza generalizados.
Que nadie piense en fotografías explícitas ni en fotografías "genitales" por llamarlas así. Ni son de mi agrado ni es mi intención hacerlas. Llevo unos días viendo fotos de desnudos artísticos tanto femeninos como masculinos, pero especialmente estos últimos, a ver si cojo ideas. Y así es como conocí a Jeff Bark.
Debo trabajar más en la búsqueda ya que el desnudo masculino es especialmente difícil de hacer sin entrar en lo soez y quiero tener claras mis pretensiones. De momento ya tengo definidos algunos aspectos: juegos de luces y sombras, diferencia de posados: naturales y forzados, tratamiento de colores por separación de canales y fondos y escenarios sencillos, casi todos de estudio.
Ya veremos como queda. De momento disfrutad con Jeff visitando su página web.
Para terminar quiero hacer referencia al trabajo de Bark. Las fotografías son grotescas, te hacen pensar, juegan con la estética, algunas retro y otras modernas, el tratamiento de los fondos, de los colores, de los bodegones es digno de admiración, los y las modelos te hacen pensar en algo más que el componente sexual, los gordos y las gordas también se desnudan y tienen pechos y culo y forman parte de la realidad nos guste o no, lo aceptemos o no. Poca gente se cepilla a un/a modelo, admiremos la belleza de lo propio y de lo que tenemos en casa o simplemente a nuestro alcance.
Visitad la web, reflexionad... volved a visitarla. Miraros al espejo desnudos y desnudas. Admiraros: sois bonitas y bonitos. Amad a vuestro cuerpo tal y como es, con sus imperfecciones. Os hará más felices.
